¿Qué es la aerotermia y cómo funciona?
La aerotermia es una tecnología moderna y eficiente que combina aire, agua y electricidad para obtener energía para el calentamiento de espacios interiores y exteriores. Está compuesta por una unidad exterior que captura las radiaciones solares para luego comprimirlas hasta generar calor, el cual es transferido a un circuito de agua o refrigerante.
Una vez dentro del circuito, el calor generado se aprovecha para calentar el aire destinado para climatizar los espacios interiores y para obtener agua caliente. Esta agua se distribuye a través de radiadores, fancoils y/o suelo radiante para calentar los espacios de la casa.
Además de ser un sistema muy eficiente energéticamente, se trata de una tecnología sostenible que no emite dióxido de carbono al aire. Esto se debe a que no requiere de combustibles para su funcionamiento, sino que aprovecha la energía térmica del aire y de los rayos solares. La aerotermia es, por tanto, una excelente opción para quienes desean contribuir al cuidado del medio ambiente.
Además de ser un sistema muy eficiente energéticamente, se trata de una tecnología sostenible que no emite dióxido de carbono al aire. Esto se debe a que no requiere de combustibles para su funcionamiento, sino que aprovecha la energía térmica del aire y de los rayos solares. La aerotermia es, por tanto, una excelente opción para quienes desean contribuir al cuidado del medio ambiente.
Pros y contras de la aerotermia
Pros:
– Es una fuente limpia y sostenible de energía.
– Proporciona calefacción eficiente, ahorra energía y dinero.
– No contamina. Reduce notablemente las emisiones de CO2.
– Alta rentabilidad, hasta un 75% de ahorro en la factura de la luz.
– Es válido tanto en verano como en invierno (aire acondicionado y calefacción).
– Se puede utilizar para la producción de agua caliente sanitaria (ACS), evitando así tener dos aparatos en casa.
– No requiere combustibles fósiles ni produce desechos.
– Utiliza la energía térmica del aire y los rayos solares.
– No hay apenas ruidos en comparación a los sistemas habituales.
Contras:
– No es aconsejable en áreas climáticas muy frías, ya que el rendimiento es menos que en las zonas más cálidas.
– Requiere una inversión inicial para instalar el sistema y los componentes.
– Requiere de una unidad exterior, lo que puede ser un problema o engorro en cuanto a ubicación y estética.
– Su eficiencia óptima es cuando se utiliza para la calefacción a baja temperatura, ya que en la generación de agua caliente a temperaturas estándar en un sistema de radiadores tradicional, reduce bastante su capacidad de ahorro en electricidad.
¿Cuánta energía ahorramos?
Es evidente que el ahorro es bastante considerable, sobre todo si utilizamos radiadores eficientes o suelo radiante, e inclusive si tenemos placas solares, el ahorro ya se convierte en muy importante.
Es el equipo de calefacción con electricidad más eficiente en el mercado. Por cada 1kw consumido de electricidad, puede generar en 4kw de potencia calorífica para la vivienda.
