Los equipos de biomasa son totalmente seguros. Hoy desgranamos los factores que garantizan la seguridad en las estufas de pellets.
El combustible
Como sabes, el combustible que se usa en los equipos de biomasa son los pellets. Los pellets están hechos de madera prensada proveniente de restos forestales. Por su composición, son menos inflamables que el gas o el gasoil y no explotan, como sí pueden hacerlo los combustibles fósiles.
Funcionamiento automático
A diferencia de otros sistemas de climatización, en las estufas de pellets no hay que poner pastillas para encender el fuego ni arrojar directamente la madera. Los pellets se introducen por una ranura en un tanque con capacidad para varios kilos situada en algún lugar del equipo. La estufa se regula automáticamente para consumir el combustible que necesita según la temperatura indicada y tiene una autonomía de entre 1 y 5 días dependiendo del modelo, así que por tu parte no tienes que hacer nada más.
Detalle del tanque para pellets de la estufa Ermética 98 Redonda
Igualmente, las estufas e hidroestufas tienen puertas de seguridad con el mango recubierto de plástico, para evitar quemaduras. Siguiendo en esta línea, todos los equipos están recubiertos de acero inoxidable, que es un material duradero, con una alta resistencia al calor y que aporta un aspecto muy elegante.
Estufa Petite en color burdeos. A la derecha se aprecia el mango de la puerta de seguridad
Elegir el lugar adecuado
En esto los comerciales y técnicos de Ecopel te ayudarán.
Según el manual de seguridad, las estufas e hidroestufas de pellets deben situarse a una distancia mínima desde los lados y la parte posterior de determinados materiales atendiendo a su inflamabilidad:
- Distancia mínima de 20 cm de material no inflamable.
- Distancia mínima de 40 cm de material moderadamente inflamable.
- Distancia mínima de 80 cm de material fácilmente inflamable por la parte delantera.
En el caso de las calderas, normalmente se instalan en espacios pensados para estos equipos y con espacio suficiente. Al ser más grandes y tener más potencia, las distancias de seguridad se amplían y se aplican a cualquier elemento:
- Distancia mínima de 20 cm desde la parte posterior.
- Distancia mínima de 40 cm desde los laterales.
- Distancia mínima de 100 cm por delante.
Si la estufa, hidroestufa o caldera estuviera conectada a un muro de madera u otro material inflamable, es necesario aislar el tubo de descarga de humo con fibra cerámica.
En todos los casos, ambos laterales deben de tener el suficiente acceso para que el técnico pueda realizar las labores de instalación, reparación y mantenimiento.
Estufa instalada por Ecopel en un comedor de una casa particular
Toma de aire y salida de humos
Las estufas, hidroestufas y calderas siempre llevan toma de aire y salida de humos.
Toma de aire
El equipo debe disponer del aire necesario para garantizar un funcionamiento regular de la combustión. Por eso, siempre se instala una toma de aire exterior con un diámetro mínimo de 50 mm. Esto garantiza que la estufa disponga del oxígeno para funcionar a pleno rendimiento y asegura que el ambiente no se cargue, ya que el equipo extrae el aire del exterior y no del interior de la vivienda.
Salida de humos
La salida de humos tiene que estar dedicada exclusivamente a la estufa y no se puede compartir con otros aparatos. Se usan tubos aislantes de acero inoxidable AISI 316 «doble capa» para evitar condensaciones cuando el tubo pasa por el exterior o por zonas no climatizadas. En caso de pasar por una zona climatizada se pueden instalar tubos capa simple inox AISI 316.
Salida de humos de acero inoxidable de una caldera instalada por Ecopel en un piso de Barcelona
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